martes, 24 de diciembre de 2013

«La mayoría de los cánceres orales se diagnostican en estadios avanzados»


Cinco expertos analizan la situación del cáncer oral en España
Cada año mueren en España alrededor de 1.200 personas como consecuencia de padecer un cáncer oral y buena parte de estos decesos, hasta un 50%, se debe a la tardanza del diagnóstico. GACETA DENTAL ha reunido un grupo de profesionales relacionados directamente con esta enfermedad para tratar de acotar los motivos por los que esta dolencia se diagnostica tarde y mal y para concienciar a los odontólogos de que este tipo de tumores como mejor pueden ser detectados en su fase inicial es durante las exploraciones de la práctica clínica diaria.
Los cánceres de la cabeza y el cuello son los sextos más frecuentes, y casi la mitad de ellos, el 48%, se localizan en la cavidad oral, lo que representa aproximadamente el 3% de todos los cánceres. Afectan anualmente en España a ocho de cada 100.000 personas, estadísticas que, trasladadas al resto del mundo, suponen el diagnóstico de más de 575.000 nuevos casos, la mayoría de ellos detectados en estadios avanzados, lo que se traduce en un desenlace fatal en la práctica totalidad.

GACETA DENTAL ha reunido a cinco profesionales que tratan de cerca esta enfermedad para analizar las posibles causas que dan lugar a este frecuente diagnóstico tardío. Se han sentado a la mesa redonda propuesta los doctores Juan López-Quiles y José Ignacio Salmerón, cirujanos orales y maxilofaciales, este último, jefe de sección del Hospital Gregorio Marañón; Alberto Villacieros Díaz, odontólogo y director de la Unidad Dental Oncológica de Clínica Román, y los profesores titulares del Departamento de Medicina y Cirugía Bucofacial de la Facultad de Odontología de la Universidad Complutense de Madrid, Rocío Cerero Lapiedra y Germán Esparza Gómez. Los cinco nos han ayudado a analizar el problema y a tratar de desarrollar las conductas que permitan acelerar la conclusión diagnóstica y agilizar el proceso por el que pasan los pacientes afectados de cáncer oral.
Diagnóstico tardío
Según los datos manejados por la Unión Internacional Contra el Cáncer (UICC), en los países desarrollados entre el 80 y 90% de los pacientes son diagnosticados de cáncer en una fase avanzada e incurable de la enfermedad, de los que el 30% podrían haber sido curados si se hubieran diagnosticado tempranamente.
José Ignacio Salmerón afirma que en el caso del cáncer oral esto es una terrible realidad, porque «la mayoría de carcinomas que vemos están en estadios avanzados, T3 o T4, y son muy pocos los que nos llegan en estadios precoces, T1 o T2. Esto hace que la supervivencia caiga dramáticamente, ya que en un estadio avanzado, la supervivencia a largo plazo es inferior al 20%. Hay dos motivos fundamentales para que esto sea así, el primero y más importante es que los pacientes acuden tarde al profesional porque solamente lo visitan para una exploración cuando ya aparece una sintomatología muy evidente de dolor, de dificultades para la deglución o la fonación. Pero también es cierto, y este es el segundo motivo principal por el que el cáncer oral se diagnostica tarde, que el profesional que lo ve en primera instancia no es capaz de reconocerlo. Esto hace que se demore el diagnóstico y su tratamiento, o bien que se realice un mal diagnóstico y se le administre al paciente durante algún tiempo tratamientos antibióticos, antifúngicos o colutorios, y para cuando el enfermo es derivado al especialista ya es demasiado tarde. Creo que el diagnóstico precoz está en manos de los profesionales de Atención Primaria, principalmente dentistas, pero también médicos de familia».
La profesora Rocío Cerero tiene clarísimo lo que hay que hacer para evitar que estos carcinomas sigan diagnosticándose en estadios avanzados: «Es necesario potenciar que los odontólogos sepan diagnosticar el cáncer oral porque son quienes mejor lo pueden ver. El médico de cabecera, en cambio, puede distinguirlo peor, porque en un despacho con mala iluminación, y sin un sillón dental, es difícil apreciar una lesión de estas características. Por eso habría que potenciar mucho la figura del odontólogo, ya sea de Atención Primaria o de cualquier clínica para hacer una consulta de despistaje de cáncer oral como ocurre con otras especialidades. También es fundamental trasladar a los pacientes la necesidad de ir al odontólogo para realizarse una revisión».